Crónica
La crisis del PP

María San Gil se despide del PP manifestando su desconfianza en Mariano Rajoy

LIBERTAD DIGITAL. 30.06.2008

Ante la celebración del Congreso del Partido Popular del País Vasco que tendrá lugar los próximos días 11 y 12 de julio, quiero confirmarte mi decisión de no volver a optar a la Presidencia.  

En estos cuatro últimos años estamos asistiendo a una operación, orquestada por el Gobierno del Sr. Rodríguez Zapatero en connivencia con los nacionalistas, en la que impera el relativismo y que consiste en transformar política y socialmente nuestro país. Este proyecto de España contempla, entre otras cosas, la dispersión de la idea nacional que permite a los nacionalistas vascos seguir avanzando hacia la autodeterminación, además de la marginación del Partido Popular disimulada con buenas palabras.  

En mi opinión, la acción política del Partido Popular ante esta situación debería estar dirigida a una oposición frontal a un proyecto que choca en lo esencial con nuestro proyecto de España, una gran nación de ciudadanos libres e iguales de la que sentirnos orgullosos.  

Sin embargo, a lo largo de los últimos meses, y especialmente a través del desarrollo del último Congreso de Valencia, he podido confirmar que la Dirección Nacional del partido tiene una visión completamente distinta de la mía en relación con la situación política y social y con la manera de enfrentarse a ella. A esta nueva estrategia se ha sumado una parte mayoritaria de los dirigentes vascos.  

Una vez manifestada mi desconfianza en Mariano Rajoy y comprobado que yo a mi vez no respondo a la confianza de la dirección del PP vasco, creo que lo más honrado, con el partido y conmigo misma, es apartarme de la vida política.  

No quiero despedirme sin decirte que ha sido para mí un privilegio enorme presidir durante cuatro años el PP vasco, formado por los mejores hombres y mujeres de nuestra sociedad, y quiero manifestarte mi profundo agradecimiento por el apoyo y el respaldo que durante este tiempo he recibido, sin el cual todo mi trabajo hubiera sido imposible.

María San Gil justifica su plante por una quiebra de confianza en Rajoy
Lamenta haber tenido que insistir en temas básicos como la definición de nación o el papel del PNV ante el terrorismo

LIBERTAD DIGITAL. EFE. SAN SEBASTIÁN. Jueves, 15 de mayo de 2008

La presidenta del PP del País Vasco, María San Gil, anunció ayer que no volverá a liderar su formación en el País Vasco si se confirma el "giro" de la política de este partido y no supera la "quiebra de confianza" que en este momento le separa del líder popular, Mariano Rajoy.

San Gil explicó en una conferencia de prensa en San Sebastián que no ha firmado la ponencia política del PP, pese a que contiene todos los artículos que ella ha defendido, por la actitud mantenida por los otros ponentes y los representantes de la dirección nacional, con los que ha tenido que discutir, ha dicho, "hasta el concepto de nación".

Tras condenar el atentado de Legutiano, San Gil pasó a desgranar con actitud seria los motivos que le han llevado a no suscribir la ponencia política que debatirá el PP el próximo mes en el congreso de Valencia.

Según indicó, desde el principio del proceso de redacción de la ponencia surgieron entre los tres ponentes "discrepancias de fondo" que llegaron hasta la existencia de dos textos "claramente contrapuestos".

Diferencias con el interlocutor

Los redactores informaron a la dirección nacional de la situación y el presidente, Mariano Rajoy, nombró a José María Lasalle como interlocutor entre ambas partes para intentar llegar a un acuerdo, pero, según San Gil, el intermediario "discutía y rebatía" su análisis político y la "necesidad de plasmar de una forma clara y evidente cómo tiene que ser la propuesta de proyecto de esa gran España unida de ciudadanos libres e iguales".

"Si la persona que Mariano Rajoy me pone como interlocutor me discute hasta el concepto de nación, pues me preocupo", afirmó.

Cuando María San Gil entendió que "no había una postura clara de defensa del proyecto" del PP se puso en contacto el viernes con Rajoy y éste le garantizó que todos los artículos que ella quería incluir quedarían plasmados en la ponencia, como finalmente ha ocurrido.

No obstante, San Gil precisó que el mismo domingo "se dio una lucha por intentar modificar, cambiar o suprimir determinados artículos" que ella entendía "imprescindibles y absolutamente necesarios" porque hacían referencia a la definición de España "como gran nación", al Estatuto catalán y la futura reforma del vasco, al papel del PNV respecto al terrorismo, a la consulta convocada por Ibarretxe o a la "corresponabilidad" del PSOE "a la hora de disgregar España".