El 11M de 2004

Los hilos cortados 2

LIBERTAD DIGITAL, 25 de julio de 2009, Luis del Pino

El 13 de noviembre de 2001, la Comisaría General de Información llevó a cabo la "Operación Dátil", con la que se desarticuló la célula española de Al Qaeda, liderada por Abu Dahdah. Una de las personas detenidas en aquella operación era un marroquí, Said Chedadi, dueño de la tienda de ropa AFILA en Lavapiés. Un dato importante es que esa tienda de ropa estaba situada enfrente del lugar donde, mucho tiempo después, alguien compraría (probablemente el mismo 11-M) la falsa mochila de Vallecas.

Como consecuencia de la detención de Said Chedadi, alguien (quizá su propia familia) comenzó a recoger firmas pidiendo "Justicia y libertad para los musulmanes detenidos desde el 13 de noviembre de 2001".

Cuando, después del 11-M, la Policía registró la casa de la C/ Alfaro 35 en la que vivía el hermano de Said (Mohamed Al Hadi Chedadi, que fue detenido en relación con los atentados de Madrid y luego fue puesto en libertad), encontró siete folios de firmas de ese manifiesto, aunque al sumario sólo se adjuntaron seis.

El examen de esos folios de firmas resulta muy curioso, porque casi parecen una hoja de ruta de esa supuesta "célula de Lavapiés" que se utilizó, en las primeras semanas después del 11-M, para vestir con ropaje islamista la patraña. Entre esas firmas aparece mucha de la gente que luego sería detenida por la masacre de Madrid en Lavapiés, o familiares de ellos, aunque ninguna de esas personas llegaría a ser acusada en el juicio.

Folio 1

Folio 2

Folio 3

Folio 4

Folio 5

Folio 6

Así, en esos folios nos encontramos con personas como:

Pero las firmas más curiosas de todas son, justamente, las tres últimas del último folio. Porque corresponden a tres personas que permitirían establecer una conexión entre la "célula de Lavapiés" y el "grupo de El Chino": concretamente, se trata de las firmas de Mustafá Biad (compañero de piso de los Ahmidan; apareció documentación suya en el Opel propiedad de la suegra de Jamal), de Samira Loukili (testigo en la boda de Mustafá Ahmidan) y de Rachid Ahmidan (hermano de Jamal).

Resulta sorprendente que nadie se preocupara nunca de preguntar a los Chedadi, ni a los Ahmidan, por esas firmas, porque son de los pocos indicios conocidos de conexión entre dos grupos que nada tenían que ver entre sí. Como también resulta curioso que se trate, precisamente, de las tres últimas firmas del manifiesto.

¿Cuándo fueron añadidas esas firmas? ¿Antes o después del 11-M?

Se admiten apuestas.