Se aprueba en Roma en octubre de 2015 la validez de la fase diocesana y se abre la fase romana de la causa de beatificación y previamente de declaración de martirio de otros siete sacerdotes asesinados en la persecución religiosa en la zona roja durante la Guerra de España de 1936
ReL 17 octubre 2015
La Congregación para las Causas de los Santos
de la Santa Sede ha aprobado el decreto de validez de la causa de
declaración de martirio y beatificación de siete sacerdotes
diocesanos asesinados por milicianos del Frente Popular en los
primeros meses de la Guerra Civil Española.
La causa fue promovida por la diócesis de León tras el visto
bueno del Consejo Presbiteral en 2004, a propuesta del obispo
Julián López, para el inicio de este proceso.
Con este decreto de validez culmina de manera favorable la fase
diocesana de esta causa, iniciada el 18 de mayo del año
2009 y que por impulso del postulador diocesano, Carlos de
Francisco, recopiló durante más de tres años toda la
documentación, con datos, documentos y pruebas testificales
donde se refleja el testimonio de fe que llevó a la muerte a
estos siete integrantes de presbiterio diocesano, alguno de ellos
tan tempranamente como el 19 de julio, al día siguiente del
Alzamiento.
Todo ese material, incorporado a un expediente de 500 folios, se
selló y lacró en un acto público celebrado en el Seminario de
León el pasado día 10 de diciembre de 2012 y se envió a la
Congregación para las Causas de los Santos, lo que suponía la
clausura de la fase diocesana y la espera a la apertura de la
fase romana de la causa.
Con el decreto de validez dado en la Santa Sede se abre
formalmente la fase romana de esta causa cuyo objetivo
es lograr la declaración del martirio y la
beatificación de los siguientes sacerdotes:
José Álvarez Álvarez, de 68
años, párroco de Campo de Villadiel, donde fue asesinado el 19
de julio.
Ovidio González Bandera, de 45 años, ecónomo
de Manzaneda de Torío, asesinado en Pajares (Asturias) el 24 de
agosto.
Ricardo Barredo Salces, de 56 años, párroco de
Frama, asesinado en Prellezo (Cantabira) el 31 de agosto.
Constantino Bayón García, de 51 años,
párroco de Cosgaya (Cantabria), asesinado en Fuente Dé (Cantabria)
el 25 de septiembre.
Ignacio Gutiérrez Díez, de 28 años, ecónomo
de Campohermoso, asesinado en Vegacerera el 25 de noviembre.
José Rodríguez Borregán, de 28 años, ex
ecónomo de Chozas de Arriba, asesinado en Santander el 22 de
diciembre.
Francisco Galiante Casado, de 43 años, vicario
de Santo Toribio de Liébana (Cantabria), asesinado en Espinama (Cantabria)
en 1937.