ETA preparaba en la casa de Cahors potentes explosivos parecidos a los usados por Al Qaeda

DIARIO DE NAVARRA. Martes, 4.09.2007. MELCHOR SÁIZ-PARDO. COLPISA. MADRID.

Los detenidos robaron las pastillas de combustible para montar bombas como las del 7-J en Londres (7.07.2005).
El jefe del aparato logístico de ETA, Luis Ignacio Iruretagoyena, "Suny", utilizaba la casa de Cahors, en la que fue detenido el pasado sábado junto a otros tres etarras, como laboratorio para fabricar nuevos explosivos muy potentes, similares a los usados en los últimos años por grupos terroristas islamistas. Mandos de la lucha antiterrorista galos informaron ayer de que en este centro logístico de ETA, además de las bombas de la T-4 y de Castellón, Iruretagoyena fabricó los nueve kilos de pentrita casera, mucho más fuerte que la comercial, que fueron encontrados el 2 de julio de 2007 en el interior de una furgoneta en Saint Jean de Pied-de-Port, a escasos kilómetros de la frontera con Navarra y que los etarras Joseba Anton Aranibar, Ekaitz Aguirre y Aingeru Cardaño pretendían hacer estallar en breve en España coincidiendo con las fechas del debate del estado de la Nación.

Ese explosivo, que fue entregado al comando por Aranibar, hombre de confianza de Iruretagoyena, fue sintetizado en Cahors por este etarra.

En la operación, Suny utilizó un laxante en polvo llamado Auxitrans. Según las mismas fuentes francesas de la lucha antiterrorista, también empleó ese mismo purgante para fabricar la nueva pentrita de inspiración "yihadista" hallada en los zulos de Amorebieta el pasado diciembre de 2006, en el monte Urrugne en el País Vasco francés también en diciembre de 2006, y en un garaje del "comando Urederra" en marzo de 2007.

Además, sostienen los expertos, Iruretagoyena utilizó la casa de Cahors para intentar confeccionar nitrometano, un explosivo líquido extremadamente inestable usado en el atentado contra un edificio de Oklahoma en 1995, y que es empleado desde hace años por Al Qaeda en Oriente Próximo.

Iruretagoyena trató de sintetizar el nitrometano a partir de la descomposición de Tornado Fuel, un combustible para aeromodelismo.

Siguiendo sus pasos

Tanto el Tornado Fuel como el laxante en polvo fueron encontrados en poder de Iker Mendizábal y José Juan García cuando fueron detenidos el pasado 11 de julio de 2007 en las cercanías de Angulema, también en Francia.

Ambos, según los especialistas de la Guardia Civil y de la subdirección antiterrorista de la Policía Judicial francesa, eran los «aprendices de brujo» de Iruretagoyena.

Los dos etarras se dedicaban a seguir los pasos de Iruretagoyena en el laboratorio casero encontrado el 24 de agosto de 2007 en una vivienda de Commelle-Vernay, en el departamento de Loira, y que era una especie de franquicia del laboratorio principal instalado en la casa de Cahors.

En la furgoneta en la que circulaban Mendizábal y García, los agentes hallaron un centenar de bolsas del laxante y cinco litros de Tornado Fuel.

Aunque los investigadores franceses no han encontrado por el momento en la casa de Cahors restos «significativos» de estos elementos, sí que han hallado pruebas de que Iruretagoyena y sus tres compañeros -Alaitz Aramendi, Oihan Barandalla y Ander Múgica- están detrás del robo de 44 kilos de pastillas de combustible sólido el pasado 26 de junio de 2007 en la empresa de alpinismo deportivo Horizon Vertical, en la localidad de Bischoffheim, en la región francesa del Bajo Rhin. Durante el registro de la vivienda de Cahors, los funcionarios han hallado parte del material deportivo que los etarras aprovecharon para llevarse del establecimiento tras robar las pastillas.

La orden de robo

Iruretagoyena, sostienen los mandos policiales franceses, fue quien ordenó el robo de las pastillas marca Esbit para experimentar con un nuevo explosivo, también de origen islamista: diamina de triperóxido de hexametileno (DTHM), el potente explosivo casero utilizado por terroristas "yihadistas" en los atentados del 7 de julio de 2005 en el metro y los autobuses de Londres, y que se obtiene al mezclar las pastillas de combustible seco con ácido cítrico y agua oxigenada.

Durante las últimas horas del registro de la casa de Cahors, los investigadores también encontraron otro elemento que se considera clave para acusar a los terroristas del intento fallido de atentar en Castellón y del secuestro de la familia de Orio.

Efectivamente, la policía francesa ha recuperado en la vivienda la "carta gris" (certificado de matriculación) del vehículo Renault Scenic robado que los terroristas utilizaron para transportar a la familia y que quemaron en la localidad para borrar las huellas.

Los funcionarios ya habían hallado el ordenador portátil propiedad de la familia de Orio, que el comando había sustraído tras el rapto.