Los productos de consumo frecuente se encarecen casi un 8 por ciento en diciembre de 2007

Libertad Digital. (Europa Press). Lunes, 4 de febrero de 2008 

El precio de los productos de compra habitual, tales como los alimentos básicos, el tabaco, el transporte y el ocio, aumentó un 7,9% el pasado mes de diciembre respecto al mismo mes del año anterior, lo que supone 4,7 puntos más que en agosto y 3,7 puntos por encima del IPC general, que alcanzó el 4,2% en diciembre, según recoge el último Informe de coyuntura de Caixa Catalunya.

Dicha entidad advierte que este encarecimiento supone un “riesgo”, ya que se podría trasladar a otros bienes y servicios e, incluso, a los propios salarios, hasta el punto de que podría “repercutir al alza sobre la evolución de la inflación en el medio plazo”. Por contra, el Gobierno ha mantenido que el repunte que ha experimentado el IPC a lo largo de los últimos meses se suavizará a partir del próximo mes de marzo.   Según Caixa Catalunya, a pesar de que las señales "no son todavía concluyentes" y que las expectativas para 2008 se mantienen "relativamente ancladas", existen "síntomas" de que el mayor incremento del coste de los productos de compra habitual se está trasladando en mayor medida que el IPC general en la percepción de los consumidores sobre la inflación. El estudio señala que el incremento del precio de estos productos se ha acentuado desde el pasado verano.   Entre los productos que experimentaron una mayor subida de precio interanual en diciembre se encuentran la leche, con un 31% más; los carburantes para vehículos, con un 16,2% más; el pan, con un 14,4%; y los huevos, con un 9,6%. Asimismo, las frutas frescas se encarecieron un 7,8%, el tabaco un 7% y las hortalizas, legumbres y patatas, un 5,8%, "consolidando los registros de meses anteriores por encima de la inflación general", según la caja de ahorros.

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Los precios de los alimentos suben mucho más en España que en la Eurozona
DESDE 1997 EL DIFERENCIAL ES DE 14 PUNTOS

Libertad Digital. (Agencias). Lunes, 21 de enero de 2008 

Los alimentos, y fundamentalmente la fruta, son los auténticos causantes del diferencial de inflación entre España y la zona euro. En 2007, la alimentación se encareció en España el 6,6 por ciento, y en la Eurozona un 4,8 por ciento, lo que arroja un diferencial de 1,8 puntos, que se eleva  hasta 14 si tenemos en cuenta los últimos 10 años. Además, en frutas y verduras, la diferencia entre el aumento de precios de España y la zona euro es de 23 puntos. También destaca la subida de los transportes, dos puntos por encima de la Eurozona en 2007, lo que pone de manifiesto nuestra dependencia energética.

La inflación española sigue estando muy por encima de la media de la zona euro, 1,2 puntos al cierre de 2007, un diferencial del que han tenido gran parte de culpa, además de los alimentos, otros encarecimientos como los del transporte y los bares y restaurantes, superiores a los de nuestros vecinos.

El Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) -que mide la inflación con un método igual para todos los países de la moneda única- fue en diciembre del 4,3 por ciento en el caso español, frente a un 3,1 por ciento para el conjunto del área, un mal dato que afecta sobre todo a la competitividad de la economía.

Pero el diferencial se aprecia sobre todo en algunos grupos de productos –de los doce con los que se mide la inflación armonizada en todos los países–, y sobre todo en aquellos que tienen un mayor peso en los hábitos de consumo de los españoles y, por ello, en la tasa de inflación. Es el caso de la alimentación, que en España se encareció el 6,6 por ciento, muy por encima de lo que lo hizo en el resto del área, un 4,8 por ciento, lo que arroja un diferencial de 1,8 puntos.

En la inflación armonizada española, los alimentos tienen una ponderación del 21,95 por ciento, es decir, tienen la culpa de aproximadamente una quinta parte de la tasa, mientras que en el conjunto de los países del euro este porcentaje se reduce al 15,5 por ciento, por lo que el aumento de sus precios no pesa tanto sobre la inflación general.

Las fuertes subidas del petróleo han hecho encarecerse también al transporte, un 5,6 por ciento en todo el área, aunque en España se ha notado más la dependencia energética y los precios aumentaron casi dos puntos más, el 7,3 por ciento.   Otras subidas que han hecho elevarse la inflación española por encima de la europea son las de los precios de la hostelería, que subieron un 4,9 por ciento, 1,5 puntos más que en el resto de países. También en este caso influye el peso que el consumo en hoteles, bares y restaurantes tiene entre los españoles, mayor que en el resto de la eurozona, puesto que su ponderación sobre la inflación nacional es 14,3 por ciento, frente al 9,1 en la del área.

España también supera con creces a la media de la zona euro en productos como alcohol y tabaco, que se encarecieron el 6,1 por ciento frente al 2,5 por ciento del área, o las comunicaciones, que en los trece países de la moneda única bajaron una media del 2,3 por ciento, frente a la subida española del 0,8 por ciento.